En Desuso

Cuando estaba escribiendo "Llenas de Gracia" escribí algo pensando en que mi bebé por nacer, sería un nuevo comprador para el sistema.

No me equivocaba.

Es tan dulce pasar por las vitrinas, por las tiendas y confiterías, comprar dulces, muñecas, ropa, libros, cuentos... nuestro prespuesto suele ser limitado, sin embargo, mi tendencia al consumo ahora redunda en torno a mi hija, cosas ecónomicas pero bonitas, no resisto palabras como "sale" "% off" "promoción" "descuentos" "rebajas" "liquidación".

Y las cosas se van quedando en desuso, pero no estoy guardando casi nada, todo rota, gira, y se va de la casa, ropa, juguetes de bebé, alguien los puede necesitar!

Aún no me decido a salir de la bañera, ni del vasito de noche, aunque ya no los utiliza, pero son símbolos de la evolución tan normal, pero que se hace tan especial cuando ocurre dentro de las paredes de la casa.