Tus manos como pinzas

Llevamos poco mas de un mes juntas, de la mañana a la noche, de la noche a la mañana. Soy la mamá, ahora sí. Antes, yo era para Isabella como la niñera de las noches, pero ahora soy la mamá, el afecto, el apego, la alegría. Cuando lleva algún tiempo sola mientras hago algún oficio o estoy en internet, me llama, a veces a balbuceos, otras a gritos, y cuando la alzo, se me agarra con sus deditos como pinzas, me apreta, me clava las uñas y los dientes, se me trepa y se ríe...

Me quiere, me extraña y ya pronto tendré que irme a trabajar otra vez TODO el día. Es un gran dilema... me siento feliz de ser importante para ella pero culpable por acostumbrarla a mí sabiendo que luego debo irme otra vez.

Ya sabe donde está la cabeza, cuando le digo: "bebé, cabeza" y cuando le digo "arriba" levanta sus manos y al escuchar "eso, bebé, bravo" aplaude. Se ríe cuando alguien ríe, tiene muchas cosquillas y sale a "cola pelada" gateando veloz por la cama cuando le quito el pañal para cambiarla y se ríe con picardía. Ahora tiene 4 dientes, tres abajo y uno arriba, se las arregla con ellos para comer de todo lo que se le ofrece, le encanta el pollo, come arroz y todavía sus sopitas de verduras que le hago desde los 6 meses. Agarra papas fritas con la mano, come galletas de soda, y encantadoramente, se levanta sobre sus pies agarrada de la baranda de la cama, me mira para que la felicite.

Esa es mi bebé ahora. Dulce niña, flaca pero saludable. Inteligente y de crecimiento rápido.

Ahora, que por fin se durmió, debo ir a cortarle las uñas.