Estoy descansando una semana en el pueblo de mis abuelos, traje a Isabella para que la conozcan y también quiero unos días para pensar, tomar decisiones, ir a Misa todos los días, ver la familia.
Al ser la hija mayor de la hija mayor, crecí sin primas de mi misma edad, pero ahora hay dos generaciones muy marcadas: Una de 18 a 20 y otra de 10 a 12, son primas y primos que son amigos, compinches, compiten y se ayudan unos con otros.
Anoche salí con mis primas de la generación 88 a tomar una cerveza. Hablamos de cosas, y de que hubo un tiempo en que yo tenia que hacerle pinzas en la cintura a los pantalones porque me quedaban muy amplios... y yo les confesaba que si tuviera los medios económicos me haría una lipo. También les conté cómo eran ellas de chiquitas. En fin, nos divertimos.
Tan bonita la familia.
Isabela no tiene muchos primos por ahora, no es la época de nacimiento de bebés en la familia, por eso todos andan embobados con ella. Y ella, ya que llevamos dos semanas juntas, ya está apegada a mí y me busca asustada cuando llega otra cara nueva a hacerle fiestas.
jueves, 17 de enero de 2008
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