Me da vergüenza haber sido tan egoísta cuando mis amigas y amigos tuvieron hijos... para mí era un evento menos importante que el cumpleaños, algo como tan normal... incluso tan incomprensible.
Ahora, mis amigos solteros y sin hijos, quieren a mi hija, siempre preguntan por ella, se interesan por su salud y su desarrollo... le mandan besitos abrazos y me dicen "dile que la quiero". Y yo me siento contenta.
Lección aprendida.
lunes, 28 de abril de 2008
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1 comentario:
que hija tan linda tienes, no le de tanta pandeyuca, dele mas bien buñuelito y natilla.
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