El viernes en la noche, escuchamos música, y digo las 2 porque la señorita rumbera cada vez que puede empieza a bailar, y también caminamos por el corredor.
El sábado fuimos a la Eucaristía en Verbum Dei y

Se la presenté a la misionera Pat

En la noche jugábamos a que nos reíamos hasta el cansancio, porque mamá muerde

El domingo muy a las 6am despues de su leche con chocolisto, vimos programas de canal 1, el de casa sobre la roca, predicacion de la iglesia oasis, la santa Misa y por supuesto Actitud Positiva.
En la Eucaristía aproveché para hacer una oración en voz alta, yo sigo diciendo Jesús yo confío en ti y tengo que repetirmelo porque a veces se me olvida.
Me sentía agradecida de despertar abrigada, con el amorcito de mi vida muy acomodada encima de mí y sé que el Señor estará grande con nosotras, que lo que en El espero, tendrá su momento.
Más tardecito la ingresé al mundo del colesterol casero con unas ricas empanadas de pollo que le hice, (claro, en aceite de girasol y sin condimentos) y en la tarde leímos cuentos y comimos crispetas, nos arreglamos las uñas y seguimos caminando. Le medí todos los zapatos que le han regalado de otras niñas que ya no los van a usar más y sorpresa que ya hay varios pares q le sirven.
Qué diferentes eran mis fines de semana antes. Pero difícilmente eran tan divertidos.
Especialmente tan tranquilos.
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